*El pequeño pueblo mexicano de Tierra Colorada despidió este jueves a las víctimas de esta tragedia causada por las emanaciones de un basurero en la que cayó la pequeña de 10 años.
Univision
El pequeño pueblo mexicano de Tierra Colorada, en el municipio de Huimanguillo (Tabasco), está de luto. Este jueves despidieron los restos de cinco víctimas fallecidas en un pozo artesanal de basura: una niña que cayó dentro y otras cuatro personas que intentaron rescatarla.
La tragedia comenzó cuando Beyanira Pérez Frías de 9 años se tropezó dentro de un pozo cerca de su casa este martes.
La niña había salido de su escuela muy cerca de su casa a donde llegó para a hacer la tarea afuera de la casa.
Según reporta el periódico local Tabasco Hoy, Beyanira estaba bajo el cuidado de su abuela, Felipa Méndez de la Cruz, que la llamó para ir a comer y, al pasar junto al pozo hecho de modo artesanal detrás del patio, tropezó y cayó en el hoyo que tiene unos ocho metros de profundidad.
El primo de la pequeña, Gerardo Montejo Frías, de 15 años estaba con el padrastro de ambos José Méndez Pérez cerca de la casa cuando escucharon gritos. Entonces corrieron hasta el pozo para ver qué había sucedido. Al llegar, intentaron rescatar a Beyanira, pero se desvanecieron por inhalación de gases tóxicos emitidos por la descomposición de basura.
El drama aún no había terminado. El vecino Carlos Montejo Rodríguez, de 46 años, se acercó para tratar de ayudar, pero también cayó.
Cuando otro vecino de la familia, Paulino Vera Gómez de 47 años, llegó para asistir, había varias personas en el hoyo intentando con cuerdas sacar a los atrapados. Paulino se lanzó, y se convirtió en el quinto fallecido en el pozo.
«El llamado a Protección Civil no fue cuando cayó la niña sino cuando ya estaban las cinco personas atrapadas», dijo a Univision Noticias Jessica Ortíz, directora de Comunicación Social del municipio de Huimanguillo, ayuntamiento que está asistiendo a la familia.
«Es una pena que el llamado no haya sido hecho más temprano. Tal vez no hubiéramos tenido que lamentar tantas víctimas», agregó.
Una trampa mortal
«El pozo era un depósito de basura que la familia tenía en el patio de la casa, por lo que las personas que se lanzaron para rescatar a la niña murieron asfixiados por los gases acumulados», explicó Ortíz.
En cambio, la niña que fue la primera en caer falleció por un derrumbe de tierra.
Los cuerpos fueron recuperados rápidamente en la misma noche por los equipos de emergencias de los municipios de Huimanguillo y de Cárdenas. «El cuerpo de la pequeña, por el contrario, demoró una hora más en ser sacado porque no era visible ya que quedó sepultada por la tierra», explicó Ortíz.
Este tipo de pozos artesanales para descartar basura son comunes en las zonas humildes.
Este, que resultó ser una trampa mortal, ya fue tapado con grava y piedra por funcionarios de la Dirección de Obras Públicas.
Pobreza
Las familias tocadas por esta tragedia son humildes. Según medios locales, la mayoría trabajaba en el campo.
Por ello, este jueves los cuerpos de los fallecidos fueron velados en ataúdes donados en la misma noche del accidente por el presidente municipal, José Sabino Herrera.
Además, el ayuntamiento está apoyando con los gastos de los sepelios y las carrozas.
Paulino Vera Gómez vivía en Tierra Colorada cuarta sección, pero era oriundo del municipio de Paraíso por lo que sus restos fueron trasladados allí por una de las carrozas este jueves.
«El municipio está también dando asesoría legal a las víctimas», agregó Ortíz.
En medio del calor de este jueves en Tierra Colorada, compañeros de escuela de Beyanira que cursaba cuarto grado, y de Gerardo que estaba en secundaria, llenaron la sala velatoria para despedir a los fallecidos. Sus ataúdes apoyados en sillas de madera marcharon cerca del mediodía en las carrozas municipales.