*Por mar o por tierra, los cárteles le roban a Pemex miles de millones de pesos cada año, incluso con ayuda de extrabajadores de la petrolera.
Univision
Cada 24 horas el crimen organizado roba 23,500 de los dos millones de barriles de combustible que produce Petróleos Mexicanos (Pemex), ocasionando pérdidas anuales por más de 21,000 millones de pesos (más de 1,000 millones de dólares) para la empresa que es propiedad del gobierno de México.
La pérdida de dinero y de combustible por culpa del crimen organizado actualmente es una de las razones de la escasez de gasolina que enfrentan algunos estados del país, informó la petrolera mexicana. Y son los criminales quienes también se han visto beneficiados con el anuncio del aumento del 20% al precio de la gasolina desde enero, donde el litro de Premium costará 17.79 pesos (casi un dólar).
Univision Noticias visitó un punto de venta ilegal de diésel que se encuentra al oriente de la Ciudad de México, donde la demanda terminó con las reservas de combustible robado y los despachadores volvieron a sus casas desde temprana hora de este jueves.
Por años, este local clandestino ha abastecido de combustible a camioneros y a choferes de ruta, vendiendo el diésel a un costo menor que en las gasolineras de Pemex. El bidón de 25 litros de diésel robado cuesta 250 pesos (13 dólares), mientras que en las gasolineras por la misma cantidad se tendría que pagar 350 pesos (18 dólares).
Silvia Ramos Luna, secretaria de Estudio y Análisis Petroleros de la Unión Nacional de Técnicos y Profesionistas Petroleros, quien además ha trabajado como inspectora de seguridad de Pemex, explicó que el crimen organizado opera con la complicidad de funcionarios de la petrolera porque se trata de «un negocio muy jugoso y que deja ganancia para todos».
«En en el negocio ilegal hay mucha gente involucrada, incluso desde dentro. Porque los cárteles no solo roban gasolina o turbocina -que uno entiende que la usan para sus avionetas, vehículos o para vender-, sino que también ya operan con petróleo crudo que venden en Estados Unidos, gracias a la corrupción que impera en la emrpesa», dijo Luna a Univision Noticias y agregó que con los aumentos a los precios del combustible el robo de hidrocarburos subió este año.
La experta en refinería contó que la producción e importación de gasolinas en Pemex sigue siendo la misma, por tanto no es explicable la escasez que hay en algunos estados.
«No nos queda claro a dónde va a dar el combustible, porque nosotros producimos, hacemos el análisis y los vehículos salen cargados pero no están llegando a las gasolineras», cuestionó Ramos Luna.
El robo de hidrocarburos por mar y tierra
En el mercado negro mexicano se comercializa el combustible robado en puntos clandestinos, en gasolineras establecidas e incluso Pemex tiene registro de la venta ilegal de hidrocarburos en el extranjero.
Hay cárteles mexicanos que se dedican a robar los carrotanques llenos de combustible, pero hay otros que como piratas han asaltado buques de combustible en medio del Golfo de México.
Los Zetas o el Cártel de Jalisco Nueva Generación (CJNG) robaron a embarcaciones de Pemex en altamar con el fin de vender el producto en Centroamérica, según informes de la Secretaría de Marina publicados por el diario Reforma.
Es el caso del líder de Los Zetas, Raúl Lucio Hernández Lechuga, ‘El Lucky’, detenido en 2011, quien confesó haber creado empresas legales y fantasmas para vender diésel y gasolina a empresarios de Estados Unidos, Centroamérica y Sudamérica.
La extracción clandestina
Los cárteles también contratan a personal o extrabajadores de Pemex para ordeñar la red de ductos que se extiende por todo México.
La experta en petróleos detalló que el número de tomas clandestinas no corresponde al porcentaje de exempleados que prestan sus servicios al crimen, lo que indica que hay aprendices que finalmente están ocasionando más fugas o incendios.
Los operadores de Pemex que hacen tomas clandestinas son cotizados en el mercado negro donde se les conoce con el apodo de ‘tapineros’, pues son ellos quienes conocen la presión y el contenido de los ductos, además que tienen experiencia en hacer tapping, que es una perforación a medida exacta para robar hidrocarburos sin ser detectados por los sistemas de seguridad de la petrolera.
La habilidad de los ‘tapineros’ es tan precisa que las fugas no son detectadas por el Sistema SCADA (Supervisory Control and Data Acquisition) el cual monitorea la presión del ducto de Pemex, ni tampoco el Sistema Integral de Medición y Control de Operaciones en Terminales (SIMCOT), ni los controles de estaciones de servicio, circuitos cerrados, medidor de espesor de ductos o el sistema de medición de volumen de línea.
De acuerdo con cifras de Pemex, de 2005 a 2014 al menos 39 de ‘tapineros’ que trabajaban para la empresa fueron detenidos por robar combustibles, pero solo 15 fueron sentenciados a prisión.
Desde 2007 a mediados de 2016 Pemex ha denunciado 17,700 veces el robo de combustibleante la Procuraduría General de la República (PGR, fiscalía federal).
Los estados donde existe mayor número de tomas clandestinas son Puebla, Tamaulipas Guanajuato, Sinaloa y Estado de México, siendo la zona centro del país donde más se comercializa el combustible robado, inclusive en gasolineras establecidas, según reportó en 2015 la Produraduría Federal del Consumidor (Profeco).