*En la Moctezuma dan lecciones a la policía
NVI Noticias
Agencia municipal de San Martín Mexicapan.- “Ya mandamos al hospital a dos cholos que se dedicaban a robar y les advertimos a todos: la próxima vez los vamos a colgar y echarles lumbre; solo así logramos contener la ola de asaltos y agresiones de estos vándalos”, afirman vecinos de esta populosa colonia, que se ubica en la parte más alta del cerro de San Martín.
Subrayan que el acuerdo se tomó en asamblea, por el clima de inseguridad y violencia que se vive. “Esta área es el corazón de San Martín Mexicapan, por un lado está la colonia Hidalgo, donde reina la banda de cholos de la 18, y, del otro lado, la colonia Monte Albán donde manda la 13; además de que nosotros también tenemos a nuestros cholos y hay otros más en la colonia Azucenas”.
Expresan que cuando se enfrenta las bandas la violencia es total, “se golpean con todo y hasta los vecinos corremos el riesgo de ser agredidos; además, los cholos se dedican a asaltar a cualquier persona que pasa por donde están, no importa si son hombres, mujeres o niños”.
El acuerdo de asamblea
El presidente de la colonia, Heberto de los Santos Cruz, comenta que por esta razón en asamblea se acordó que si un cholo asalta a alguien, “ya no vamos a pedir el apoyo de la policía municipal, porque se lo llevan un rato y luego lo sueltan, nosotros vamos por él a su casa y le damos una madriza ahí”.
-¿Y ya golpearon a alguno?
-Dos veces ya lo hemos hecho, los hemos mandado al hospital, y ya se calmaron, porque a toda la gente asaltaban.
De los Santos Cruz agrega que la impotencia ante tanta agresión los hizo actuar de esta forma. “No podías mandar a tú niño a comprar algo a la tienda porque le salían los cholos y le quitaban el dinero, por eso juntamos a la gente y dijimos si la policía no hacía nada nosotros teníamos que actuar, así acordamos que cuando asaltaran a alguien se identificara quienes eran y acudiríamos a sus casas para sacarlos; en el casos de ésos dos que mandamos al hospital se reunieron más de 500 personas con palos, machetes y pistola, porque así se les dijo, y solamente de esta forma logramos tranquilizar este lugar”.
Techo contra la violencia
El presidente de la colonia subraya que la necesidad más apremiante que se tiene es el techado de la cancha de básquetbol, que ya prometieron las autoridades municipales.
Con esa obra queremos alejar de los vicios a la juventud, organizando ahí diversos torneos, pero necesitamos que esté techada, porque nos serviría para usos múltiples, a fin de también realizar ahí las asambleas y diversas actividades
“En bola agarran valor”
El señor Jorgino Rodríguez señala que en la colonia es común encontrar grupitos de jóvenes cholos que no agreden a nadie, “pero ya en bola agarran valor y es entonces que cometen sus tropelías”.
“Hace poco un joven vino a comprar un cartón de cervezas porque tenía un convivio en su casa y que, ¿no se lo quitaron los cholos?, cuando su familia vino para ver qué había pasado, pues ya no había nadie, todos se habían escondido en su casa, por eso es que la asamblea decidió hacer justicia por propia mano”.
-¿Se redujo con ello la inseguridad?
-Sí, con lo que le hicimos a los dos cholos se calmó la cosa. Antes la situación era muy peligrosa.
“Nosotros les advertimos que si seguían agrediendo a la gente los íbamos a colgar y echarles lumbre en la cancha, porque no entendían; solo así logramos que se tranquilizaran los cholos”.
Dice que ahorita anda tres cholitos robando tanques de gas, de la colonia Hidalgo, “pero ya les mandamos a decir que: o dejan de estar robando o vamos a ir por ellos a sus casas y los vamos a colgar y quemar”.
Escasa vigilancia policial
Por su parte, el vecino Salvador Ramírez García, manifiesta que la policía municipal realiza sus rondines pero de manera esporádica. “En realidad no hay vigilancia, la policía pasa de vez en cuando y luego, si llegan cuando hay un enfrentamiento los apedrean, por eso menos suben”.
Por eso los cholos actúan de manera impune, porque si se llama a la policía tarda en llegar, y si acaso llegan cuando se están peleando, les llueven los piedrazos; los agreden con piedras y corren los cholos a sus casas, para que no los puedan detener
Ramírez García recuerda que, cuando fueron por los dos cholos a sus casas, “llegó la policía pero solo se dedicó a observar lo que pasaba, porque nosotros les dijimos: no se metan, nosotros vamos a hacer justicia aquí, porque ya estamos hartos de estos vándalos y, además, los comandantes saben que cuando quieren intervenir en un hecho delictivo, los agarran a piedrazos”.
Insiste en que la necesidad más apremiante es el techado de la cancha, “porque de esa manera vamos a realizar actividades deportivas y de entretenimiento para los jóvenes, para que ya dejen esas banditas y de afectar a la gente”.