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Un enfrentamiento entre seguidores del alcalde Óscar Guerra y simpatizantes de regidores del PRI opuestos a él, se escenificó en el Palacio Municipal, lo que obligó a la Policía Estatal Preventiva a intervenir para evitar mayores daños.
El edil había convocado a una sesión de cabildo que encabezó este lunes en la mañana, por lo que tanto sus seguidores, militantes del Partido Verde Ecologista de México (PVEM), y simpatizantes de los tres regidores disidentes, también hicieron acto de presencia en las instalaciones del Palacio Municipal, donde está la sala de cabildo.
Según los regidores priistas, que han denunciado una serie de anomalías por parte de edil, entre ellos que no convoca con regularidad a las sesiones de cabildo como lo obliga la ley, el Tribunal Electoral del Estado de Oaxaca (TEEO) le ordenó convocar a una sesión de cabildo.
Los ánimos se caldearon desde que los regidores Sodiel Jiménez Santiago, Paula Vásquez Vásquez y Carlos López Vicente, regidores de obras, educación y hacienda, fueron amedrentados por los seguidores del edil al tratar de ingresar a la sesión.
Óscar Guerra rindió un informe del manejo de los recursos de su administración a lo largo de este ejercicio y cumplido el mandato clausuró la sesión de cabildo, pero los regidores priistas no quedaron conformes.
Ambos grupos enconados ya se habían preparado para el enfrentamiento campal, lo que se dio apenas concluyó la sesión y en el que fueron agredidos físicamente, tanto el edil como los regidores, que lo acusan de corrupción.
El enfrentamiento se dio a golpes e incluso garrotazos entre los asistentes en su mayoría mujeres, por lo que la la Policía Estatal Preventiva se vio obligada a intervenir para evitar desgracias mayores.
Los seguidores de los regidores disidentes que tienen tomado el inmueble desde hace casi dos meses, lograron extraer diversos productos de las bodegas del DIF Municipal, los cuales incendiaron en la explanada del Palacio.
Durante septiembre pasado, el regidor de Hacienda del Ayuntamiento, Carlos López Vicente, acusó a a Óscar Guerra del supuesto desvío de recursos públicos por 14 millones de pesos.
El edil dijo que las acciones de su gobierno y el uso de los recursos ha sido transparente, mientras que el objetivo de los regidores que lo acusan, es de extorsionarlo para dejarlo gobernar en paz.