*La representante del organismo internacional consideró que las autoridades deben dar prioridad no sólo a las consecuencias y a las víctimas, sino también a las causas y a la prevención
DEBATE
México todavía presenta un alto nivel de tolerancia hacia la violencia contra las mujeres a pesar del aumento de la visibilización de esta problemática, aseguró la representante de ONU Mujeres México, Belén Sanz, en una entrevista con Efe.
«La base y la legislación son sólidas para avanzar pero hay que poner un esfuerzo e invertir recursos financieros», explicó Sanz, en la jornada posterior del Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer.
Aunque México sea uno de los países que más empeño ha puesto en solucionar esta lacra, según ONU Mujeres, los datos que proporciona el Instituto Nacional de Estadísticas y Geografía de México (Inegi) indican que hay situaciones que «merecen preocupación y sobre todo acción», comentó la portavoz.
Según estadísticas oficiales, el 66% de las mujeres mexicanas han sido víctimas de alguna forma de violencia, de las cuales el 44% a manos de su pareja o expareja.
Además, aunque no existen datos exactos sobre feminicidios, en México hay diariamente nueve muertes de mujeres con presunción de homicido, cifra que aumentó con respecto al año pasado, cuando eran siete.
«Este dato refleja una situación muy grave pero no podemos entender el feminicidio si no entendemos el resto de formas de violencia», explicó Sanz refiriéndose a que el machismo existe en todos los ámbitos de la vida de las mujeres.
Ante esta situación, ONU mujeres considera que las autoridades mexicanas, tanto federales como estatales, deben dar máxima prioridad en las políticas públicas no solo a las consecuencias y a las víctimas, sino también a las causas y a la prevención.
«Esperamos que el nuevo gobierno ponga este fenómeno como eje de prioridad dentro de sus políticas», añadió.
Las recomendaciones de la ONU, que estudió el caso de México el pasado julio en una convención sobre la eliminación de todas las formas de discriminación contra la mujer, se basan en la necesidad de llevar a la práctica y de afinar el marco legal.
Para ello ONU Mujeres aconseja que haya «armonización legislativa» entre todos los estados mexicanos, fortalecimiento de las instituciones, desarrollo de políticas integrales que partan de la educación, inversión en estadísticas y el acceso a servicios de calidad.
«Es muy importante que se inculquen modelos educativos que rompan con los estereotipos que nos hacen pensar desde niños que la violencia es algo normal», aclaró Sanz.
En cuanto a la representación de las mujeres en el ámbito político en México, que ha aumentado notablemente tras las últimas elecciones, la portavoz aseguró que «no debemos relajarnos», pues las cifras siguen siendo muy pobres.
Aunque en el poder legislativo, casi el 50% de la representación es femenina debido a una reforma electoral a favor de la paridad, de 32 estados que forman el país, solamente hay tres gobernadoras, y nunca ha habido una mujer presidenta.
En referencia al Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer, la portavoz aseguró que cada año se intenta con este día «hacer un llamado a la sociedad y sacar a la luz lo que ha estado tan oscurecido por el patriarcado».
Este año habrá 16 días de activismo que culminarán el 10 de diciembre, Día Internacional de los Derechos Humanos, y que incluirán actividades culturales «que den eco a este movimiento global», sentenció.
«Mientras la violencia contra las mujeres exista, será imposible que alcancemos nivel de desarrollo sostenible y de sociedades democráticas a las que aspiramos», finalizó